Jesucristo nos pide renunciar a todo, cargar con nuestra cruz y seguirle para ser sus discípulos. No nos pone a prueba. Quiere regalarnos algo mejor. Nos los explica con dos ejemplos desconcertantes: la torre y la batalla.
Media hora de oración cada día
Jesucristo nos pide renunciar a todo, cargar con nuestra cruz y seguirle para ser sus discípulos. No nos pone a prueba. Quiere regalarnos algo mejor. Nos los explica con dos ejemplos desconcertantes: la torre y la batalla.