En la vida hay momentos de alegría y de tristeza. El encuentro con Jesús resucitado es la fuente de la verdadera alegría. Desde ese punto las tristezas no nos quitan paz y las alegrías adquieren un nuevo sentido. Cristo vive, la alegría es definitiva.
Locutor: Josetxo Vera
Danos Señor tu gracia
El gran don de Dios es la gracia, semilla de la gloria a la que somos llamados. Dios se hizo hombre para que el hombre se hiciera de Dios. La gracia es el don que recibimos para cumplir esa misión.
Vocaciones y tormentas
El Señor nos invita a la vocación, a una vocación. Cada uno la suya. Que tenemos que encontrar y ponernos en camino para realizarla, con la ayuda de Dios. Habrá tormentas y dificultades, pero Él no va a fallar. Nos espera, nos sostiene y nos salva.
La Anunciación
El templo es Jesús
La antigua alianza expresada en los diez mandamientos es también actual, pero la gran noticia es que Jesús es Señor, es hijo del Padre y en su cruz y resurrección se celebra la nueva y definitiva alianza, la liberación del pecado y de la muerte.
Volver a Cristo
En el tiempo de Cuaresma, lo propio es volver a Cristo. Quizá no estamos lejos de él, pero siempre hay cosas que convertir en nuestra alma. El mejor ejemplo de vuelta a Casa es el del Hijo pródigo.
Comienza la Cuaresma
Una montaña por delante, con la Gracia de Dios nos llevará a la Pascua, la gran fiesta. Ayudas para la ascensión: el ayuno, la oración y la limosna. Y vivirla como comunidad cristiana acompañando a los que en este Cuaresma harán el catecumenado bautismal.
San José, padre amado
San José es modelo para nuestra vida cristiana. Él vivió también su anunciación y a partir de ahí se puso al servicio de María, de Jesús y de la historia de salvación. Los personajes de segunda fila son esenciales para que los de primera fila puedan ocupar su lugar.