Estamos llamados a ser santos, pero nuestras vidas distan mucho de las de los santos. Parece que no hay camino para nosotros… nuestro camino es el de lo ordinario. Se trata de no ser mediocres en lo ordinario sino más bien, ser brillantes.
Tema: Santidad
Ser valientes con Cristo
A veces no terminamos de decir que sí a Cristo porque nos falta contar con la gracia de Dios que multiplica por infinito nuestras capacidades.
Ser pequeño para ser grande
Un esfuerzo constante en nuestro corazón: ser los primeros, los grandes, los considerados, los reconocidos. Un esfuerzo de nuestra alma: seguir el camino de los pequeños, los desconocidos, los últimos… camino de santidad, grandeza del Cielo.
De imperfectos a perfectos
Jesús en el Evangelio nos llama a ser perfectos como el Padre es perfecto. Y, ¿Qué es ser perfecto? ¿Es esto posible? ¿Cómo?
Elegidos para ser santos
San Pablo les escribe a los de Éfeso y a nosotros para desvelarnos un gran misterio: Dios quiere que seas santo, que seas hijo suyo, y para ello te ha redimido y perdona tus pecados. Aprovéchalo.
No vendas el cielo por la tierra
Dios quiere regalarnos el Reino de los Cielos. Quiere para nosotros esa gran felicidad que ansía nuestro corazón y que sólo alcanzamos estando con Él. Pero nosotros muchas veces vendemos nuestra felicidad por quedarnos con las cosas pobres y caducas de esta tierra.
También somos profetas
Mirar a San Juan Bautista no sólo como poderoso intercesor, también es un modelo para nuestra vida cristiana.
¡No dejes de soñar con cosas grandes!
La invitación de Jesús a ser como niños es una invitación a no perder la ilusión, la capacidad de soñar con cosas grandes, siempre sabiendo que tenemos un Padre que todo lo puede.